Fue resultado de un procedimiento realizado por efectivos policiales de la Zona Operacional 3, que se movilizaron tras ser alertados por disparos de arma de fuego en una casa de avenida Andrés Ceberio. Se encontró droga y un arma, y dos individuos -de cuatro personas detenidas- terminaron ante la Justicia.
La noche del 31 de enero, con las precauciones del caso, efectivos policiales de San Carlos de desplazaron hacia una finca de avenida Andrés Ceberio, ya que desde la zona se habían reportado disparos de arma de fuego, en el entorno de lo que se presumía era una boca de venta de drogas.
Frente a la finca indicada, fue detenido J.J.R.B., de 35 años, quien portaba un revolver calibre 22 con tres proyectiles, y 10 dosis de clorhidrato de cocaína que serían para la venta. El sujeto se desplazaba en una moto que también fue incautada por los efectivos actuantes.
Posteriormente, durante el allanamiento a la casa de quien fue identificado como Washington Alejandro Medina Pérez, de 34 años, se le incautó entre sus ropas tres piedras de sustancia blanca (sería pasta base); además, dos balanzas de precisión, 20 dosis de cocaína, una bolsa con marihuana y varios teléfonos celulares.
En la casa, también fueron detenidos un hombre y una mujer: el primero tenía $ 10.200 pero “estaba limpio”, en tanto en la cartera de la mujer había una dosis de droga, por lo que en principio quedó claro que se trataba de consumidores que habían llegado a comprar. Los cuatro fueron trasladados.
Cumplida la instancia judicial en la sede Penal de 2° Turno de San Carlos, J.J.R.B. fue formalizado por la presunta comisión de un delito continuado de negociación de estupefacientes, en calidad de coautor, y por un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego, con un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego.
En tanto avanza la investigación, estará en prisión preventiva durante 90 días. En el caso de Medina Pérez, el dueño de la boca, fue condenado como autor de un delito continuado de negociación de estupefacientes, con un delito de tenencia no autorizada de armas de fuego.
En su caso, la Justicia le aplicó una pena de dos años de penitenciaria efectiva. La pareja que se encontraba dentro de la casa de Medina quedó en libertad ya que por el momento no pudo probarse que tuviera vinculación con el negocio y se trataría solo de consumidores.