La Intendencia de Maldonado lleva adelante un complejo proceso de recuperación del cuerpo de agua que presenta un alto deterioro como consecuencia de distintos motivos. La tarea encarada es a largo plazo, pero se prevé que mejore la calidad de la cuenca, lo que permitirá brindar nuevos servicios turísticos.

 

La directora de Medio Ambiente de la Intendencia de Maldonado, Bethy Molina, brindó detalles del complejo trabajo de recuperación que se pretende concretar para recuperar una laguna que fue ícono de la zona costera de Maldonado y hoy presenta un alto grado de deterioro.

Consideró que la Laguna del Diario “es la carta de presentación de Punta del Este y Maldonado. Según cuentan los historiadores, fue el lugar elegido por los primeros pobladores de la zona que luego se trasladaron a otros puntos de la ciudad”, por lo cual también encierra un valor histórico-cultural.

En la década del ´50 la laguna fue represada y de ese modo durante mucho tiempo solamente realizaba el desagüe hacia el mar por desborde a través del alcantarillado y exclusivamente de agua limpia. Esta situación llevó a que se reportaran varios procesos de eutrofización.

Se trata de un importante crecimiento de vegetación sumergida que genera falta de oxígeno en la profundidad y produce malos olores. Las primeras medidas se adoptaron en 2006 y continúan en forma ininterrumpida con el corte y cosecha de la vegetación, que colabora con dejar pasar luz en profundidad.

De esa manera se consigue que haya oxígeno en toda la columna de agua. Pero a principios de 2015, un informe científico (UdelaR y la Universidad de St. Andrews (Escocia, Inglaterra) recomendó una amplia intervención como única forma de mejorar sus condiciones “de funcionamiento hídrico-biológico”.

Solo así se podría frenar y prevenir una mayor degradación con acciones de mitigación a corto plazo y con acciones de recuperación en el largo plazo, que permitirán rehabilitar la laguna, “para mantener y mejorar su capacidad productiva, favoreciendo su diversidad biológica”.

Un año después, comenzó el proceso de medición del relleno para retirarlo del espejo de agua y preservar el ecosistema. Eso significó un nuevo abordaje para la problemática de la Laguna del Diario que hasta ese momento solamente se centraba en el corte de la vegetación emergente.

En 2018 se iniciaron las tareas de remoción del barro desde el fondo (refulado del barro) y los análisis mensuales del agua arrojaron resultados favorables. Además, en forma paralela, se constató que cada vez crece menos vegetación, debido precisamente a que hay menos barro en fondo.

Actualmente se fabrican en España las compuertas de acero inoxidable que se van a instalar en la zona de las alcantarillas (contra la ruta), para exportar nutrientes hacia el mar, lo que paulatinamente restaurará el proceso natural asegurando que no se va a generar una contaminación.

Sobre el impacto que puede generar el volcado de esos nutrientes al mar, Bethy Molina dijo que “se trata de ir regulando de alguna forma el caudal de la laguna”, y aclaró que “el volumen que se va a evacuar es mínimo con respecto al volumen de agua en el Río de la Plata”.

Insistió que la recuperación de la Laguna del Diario, es a largo plazo y el proceso llevaría más de 20 años, pero remarcó que el cuerpo de agua no corre riesgo -como se ha temido- porque se intervino a tiempo y se liberó mucho espacio de fondo, lo que evita que se convierta en un bañado.

El principal objetivo es que recupere la calidad del agua para que se puedan desarrollar nuevamente deportes náuticos y utilizarla como zona de baño, de manera que se convierta en un polo de atracción turística como lo fue durante mucho tiempo y hasta hace algunos años.

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