Uno de los integrantes de la banda que asaltó el Peaje Solís está identificado, y aunque la Policía de Canelones ha realizado intensas batidas, no ha podido dar con él. Se trata de un individuo poseedor de varios antecedentes, que podría ser el cabecilla de la banda.

Los investigadores del asalto ocurrido la madrugada del 2 de mayo, han recopilado diversa información, incluidas múltiples imágenes captadas en las cámaras de seguridad del Peaje ubicado en el límite de Maldonado y Canelones, pero en territorio del primero.

Además, Policía Científica recogió diversas pruebas y muestras de sangre encontradas en una puerta cuyo vidrio fue roto por uno de los asaltantes. El ADN permitió confirmar que se trata de un individuo de Las Piedras poseedor de varios antecedentes penales.

Se están realizando distintos procedimientos en Canelones aunque por el momento no ha podido ser atrapado. Su captura es considerada clave para eventualmente conocer otros detalles de la banda y su forma de actuar. La prisión para este individuo está asegurada.

Sorpresa

El asalto ocurrió sobre la hora 2.20 de la madrugada del sábado 2 de mayo, cuando un grupo 5 delincuentes fuertemente armados, redujo a tres funcionarias y dos guardias que se encontraban a esa hora en el peaje ubicado en el límite de los departamentos de Maldonado y Canelones.

La banda se desplazó desde Canelones en dirección a Maldonado, a bordo de un automóvil Renault Clio de color rojo, matriculado con la placa SBZ 4374, que estacionó sorpresivamente en el carril central del Peaje Solís. Un sexto integrante habría esperado en otro coche en Jaureguiberry.

Rápidamente, cinco individuos fuertemente armados -incluso uno portando un marrón-, salieron en distintas direcciones: uno hacia las dos cajeras, dos hacia donde se encontraban la supervisora y dos guardias privados, y el quinto que se dedicó a recoger el dinero.

Los asaltantes se mostraron muy violentos y actuaron a los gritos y profiriendo insultos, como forma de controlar todo el escenario a una hora de muy escaso tránsito. El nerviosismo fue tan grande que uno de ellos rompió el vidrio de una puerta con su mano en lugar de usar el marrón.

Decenas de cámaras de seguridad registraron lo ocurrido, y algunos rostros quedaron nítidamente grabados, ya que los delincuentes no estaban encapuchados, sino que usaban gorros y algunos una especie de pañuelo cubriendo el rostro, lo que permitió reconocer algunos rasgos.

El Clio en el que huyeron hacia Canelones, estaba denunciado como robado desde el 18 de abril pasado en Montevideo, lo que hizo concluir a los investigadores que el vehículo estuvo “enterrado” a la espera de ser usado para el golpe en la madrugada del 2 de mayo pasado.

Sin embargo, el botín que lograron sería muy inferior a lo que se difundió y aún se sigue difundiendo, ya que la recaudación era muy escasa. Desde la hora 0 del 1° de mayo a la hora 0 del sábado 2 (24 horas), las barreras del Peaje Solís estuvieron levantadas.

Aunque oficialmente por razones de seguridad nunca se divulgó la cifra exacta, fuentes de MaldonadoNoticias aseguraron que el monto robado no superaría los $ 500.000, entre lo recaudado y lo que se mantiene en forma permanente para el manejo de cada turno.

La caja con el dinero estaba ubicada en la oficina de supervisión, y contenía gran cantidad de monedas y billetes de bajo valor, de $ 20, $ 50, $ 100 y $ 200, producto de la recaudación obtenida en solamente dos horas y veinte minutos de labor, más lo pre existente.

El Renault Clio fue encontrado poco después del asalto, abandonado, con las puertas abiertas y las luces encendidas, en una calle del balneario Jaureguiberry, situado a solamente 1 kilómetro del Peaje Solís, en Canelones. Un sexto integrante de la banda estaría al volante de otro coche.

(Foto: MaldonadoNoticias)