El Jefe de Policía de Maldonado, dijo que Lucía Díaz se llevó a la tumba un gran secreto, y que el novio de Camila Weissel es el que debe “hablar” para que se aclare su brutal homicidio. El jerarca, analizó este lunes los dos asesinatos de jóvenes mujeres ocurridos en el mes de julio, y que aún no pudieron ser aclarados.

Lucía Díaz (27), murió estrangulada entre el jueves 9 y el viernes 10 de julio, a pocas cuadras de su casa en el barrio Jaurena, y cerca de donde fue ubicado el cuerpo debajo de unos arbustos, en una zona relativamente oscura de la que no hay registros de cámaras de video.

Erode Ruíz, dijo que lamentablemente Lucía se llevó “un gran secreto”, porque nadie sabe si realmente salió de su casa en busca de conexión de Internet para su teléfono celular, o a encontrarse con alguien que por el momento se mantiene fuera del alcance de los investigadores.

El jerarca, reiteró que el asesino está en el entorno de la joven porque es casi imposible que un desconocido se hubiera encontrado casualmente con ella y haya decidido ultimarla. Ruíz dijo una vez más, que la investigación está bien rumbeada pero que faltan elementos probatorios.

En relación al asesinato de Camila Weissel (21), ocurrido minutos después de la hora 0.00 del domingo 26 de julio, el jerarca no dudó en señalar que quien tiene que “hablar” es su novio, que conducía la camioneta VW Saveiro acribillada a balazos en el barrio Biarritz.

Erode Ruíz afirmó que “estamos en el entorno de un gran ajuste de cuentas” por temas vinculados a las drogas, reiterando que es el novio de la joven ultimada de varios balazos “el que tiene que hablar”, porque tiene que saber exactamente quien podía buscarlo.

Un extremo estremecedor de este caso, tiene que ver con la certeza del Jefe de Policía de Maldonado, de que la muerte de Camila fue en realidad un mensaje para su novio, porque el asesino eligió a quien balear hasta la muerte. El atacante metió su brazo dentro de la camioneta.

De haber querido, con la gran cantidad de disparos que efectuó, perfectamente podía no haber impactado más de una o dos veces en el cuerpo de la novia de quien conducía la camioneta. “Quien la tiene bien, pero bien clara quien fue, y espero que algún día hable, es el novio”, reiteró.

Otro dato que disipa dudas, es que el feroz ataque a balazos, perpetrado con una pistola 9m.m. fue obra de una sola persona que se desplazaba en una moto. El asesino baleó la camioneta desde dos posiciones diferentes, y en parte con la misma en movimiento.

El caso Robert Pérez

En torno al caso del narco de San Carlos procesado con prisión el pasado viernes por un delito de violación a la Ley de Estupefacientes -en la modalidad de tenencia no para consumo- en régimen de reiteración real, con un delito de receptación, reconoció que se sabía de sus actividades.

Robert Heriberto Pérez (43) era investigado desde hace algún tiempo porque se sabía que era uno de los grandes vendedores de drogas de San Carlos. Aclaró que su detención no pudo ser antes porque se necesitan muchos elementos probatorios para presentarle a la justicia.

Ruíz confirmó que parte de la droga incautada -entre la que había más de 43 gramos de cocaína en estado de máxima pureza-, se encontraba escondida dentro de una pared, lo que ratifica las precauciones que tomaba este individuo que además, es un hábil declarante.

El jerarca, agregó a modo de anécdota, que Robert Pérez nunca reconoció los delitos que le imputó la justicia, a pesar de las pruebas contundentes en su contra, como la droga encontrada, el arma y decenas de proyectiles vivos, y objetos robados que había tomado como pago.

Recordó que este tipo de individuos, de gran experiencia en el mundo de las drogas, se mueve muy bien y generalmente sus actividades se concentran en horas de la noche, cuando la Policía está impedida de realizar cualquier tipo de procedimiento en una propiedad privada.

“Es un pichón de narcotraficante, frente a otros, pero sabemos que este hombre mueve mucho”, afirmó Erode Ruíz, quien no pudo responder otros aspectos del caso, porque tras su remisión a la cárcel, la Policía de Maldonado ya no tiene más contacto con el procesado.

(Foto: MaldonadoNoticias)