El atraco, que le reportó a la banda de delincuentes la suma de $ 1.400.000 y US$ 8.000, se perpetró con gran precisión sobre la hora 12.00 de este lunes y en un lugar que registraba un importante movimiento. El coche usado fue encontrado horas más tarde entre las playas Montoya y Bikini.

El funcionario (que oficia de remisero y se mueve sin ningún tipo de apoyo para realizar la tarea), fue abordado por dos hombres armados apenas había salido del local de Abitab, ubicado en el edificio de la estación de servicios Ancap de La Barra, antes de subir a su coche.

Mediante amenazas con armas de grueso calibre (largas y cortas), se hicieron de la recaudación que acababa de retirar, que según la denuncia, ascendía a $ 1.400.000 y US$ 8.000, entre efectivo y cheques. Los delincuentes huyeron en un VW Gol de color gris y vidrios polarizados.

Parte del dinero robado correspondía a la recaudación de la estación de servicios Ancap, y otra al local de Abitab que tiene acceso por la propia pista, donde había al menos 10 a 12 personas que observaron el accionar preciso de los atracadores que actuaron con absoluta frialdad.

Luego se confirmó que este coche, había sido robado mediante rapiña el pasado 1° de febrero en jurisdicción de la seccional 9ª de Montevideo. Sobre la hora 15.00, fue encontrado abandonado en una calle perpendicular a la costa, frente al parador Mantra, entre las playas Montoya y Bikini.

A pesar del cierre departamental de rutas implementado por la Policía de Maldonado hasta la hora 14.45, la banda no pudo ser capturada. Se estima que eran entre 3 y 4 hombres, fuertemente armados y luciendo chalecos antibala y pasamontañas.

Según distintos testimonios y elementos recogidos, todos vestían ropas oscuras. Uno solo descendió y abordó al remesero apenas había abierto la puerta de su coche. Segundos más tarde entró en escena otro delincuente esgrimiendo un arma larga para acelerar la entrega del botín.

Distintas fuentes coinciden en señalar que el atraco pudo haber sido entregado, porque no puede ser casualidad que la banda irrumpió en el momento justo que el remesero, sin ningún tipo de custodia o apoyo, se retiraba como otras veces con una fuerte suma de dinero y solo.

Mientras se analizan filmaciones tanto de la estación de servicios como de otras zonas y de los peajes ubicados en las rutas cercanas a Maldonado, se procura saber si la banda pudo haber tenido algo que ver con el robo de un arma y chalecos del destacamento policial de San Luis, Canelones.

De esa dependencia, en las primeras horas de la mañana de este lunes, delincuentes robaron una escopeta y dos chalecos antibala, aprovechando que el único Policía de guardia se encontraba realizando una diligencia. Ingresaron al destacamento mediante la rotura de una ventana.

Aunque inicialmente se informó que el mismo remesero había sido atracado en San Carlos el 4 de mayo de 2015, horas más tarde familiares de la víctima de aquel hecho ocurrido en pleno centro de la ciudad, descartaron que haya sido la misma persona asaltada este lunes.

En aquella ocasión, un remesero de 52 años de edad, se desplazaba por calle 18 de Julio de la ciudad de San Carlos conduciendo una camioneta, cuando fue encerrado por un Chevrolet Corsa de color blanco y vidrios polarizados, ocupado por dos desconocidos, uno de los cales bajó rápidamente.

Bajo amenazas con un arma de fuego, el delincuente se hizo de la bolsa con dinero, y nuevamente se dirigió al Corsa, huyendo junto a su compinche que se había mantenido al volante del coche, al Norte por avenida Rocha, en dirección a la Ruta 9.