El Edil del Partido Colorado, Marco Correa, recordó un planteo realizado hace un año y apeló que la administración departamental aplique “una economía de guerra”. Cuestionó y puntualizó varios gastos que está realizando la IDM, teniendo en cuenta la situación económica actual.

El Edil del Partido Colorado, Marco Correa, señaló en la sesión de la Junta Departamental de Maldonado que quería recordar un planteo que realizó un año atrás cuando asumió la actual administración departamental.

Sostuvo que no es partidario de realizar promesas en las campañas políticas, porque “pueden haber factores externos o internos que lleven a no poder cumplir esa promesa”, lo que lleva a que “la gente se desilusione”.

Señaló que pretendía hacer una “crítica constructiva” y con la intención “de que se reflexione” tanto “gobernantes como gobernados”; porque “si prometimos algo ahora no pueden haber escusas, y si existen excusas deben de ser coherentes con la realidad”, sostuvo.

Dijo que cuando un Intendente asume tiene “como finalidad superior la de cuidar y administrar lo mejor posible los recursos de todos los vecinos de Maldonado, incluso de quienes no los votamos”.

Correa referenció que cuando la actual administración asumió el gobierno departamental “inmediatamente empezaron a sobrevolar los fantasmas del caos económico, financiero, los agujeros, el muerto al hombro de la anterior administración o déficit impagables”.

En ese sentido recordó que hace un año solicitó que desde la administración se comenzara a aplicar “una economía de guerra”; destacó que “con buen criterio” el actual presidente de la Junta Departamental, edil Rodrigo Blás, “ha manifestado la difícil realidad y apoyamos el objetivo de ser más austeros”.

Sin embargo, remarcó que esta resolución del presidente del legislativo departamental debería ir “acompañada de una coherencia general; porque si no es como un bote con agujeros y tapamos uno solo”.

El edil se preguntó porque “se ahorra en esta casa y gastamos en la otra en varios rubros sin control ni conocimiento de la mayoría de los vecinos de Maldonado”.

Correa sostuvo que ni bien asumió el gobierno departamental el costo “fue carísimo”, por “el cumplimiento de los favores políticos a un sector de un partido diferente al del Intendente, lo cual seguimos pagando hasta el día de hoy pero es negado por el favorecido”, arremetió.

Dijo que a su criterio “en una economía de guerra” no se pueden hacer dos shows de fuegos artificiales con un costo de US$ 60.000; en ese sentido también señaló que “seguramente a falta de fotógrafos locales, un muchacho colombiano nos viene costando a los vecinos unos US$ 23.000, quién además estuvo encargado de la campaña del Intendente”, señalando que no quería entrar en los vínculos familiares.

También hizo referencia a la publicidad que está pagando la IDM en un diario japonés con un costo de US$ 29.000; además de viajes y contrataciones de asesores como el economista Isaac Alfie, “un amigo del Intendente que nos viene costando algo más de US$ 40.000”.

Siguiendo con el punteo de gastos, el edil hizo referencia a la consultora contratada por la IDM “que tuvo un gato de más de US$ 90.000” y el abogado Enrique Moller unos US$ 11.000, además de otras contrataciones que insumen gastos importantes. 

Sostuvo que todos estos gastos no “hacen honor a la austeridad por los que estamos todos tratando de velar”. 

Por último, el edil colorado remarcó que “nunca está de más que todos los vecinos estemos informados y saber en qué se invierte los impuestos”, señalando además que es su deber como edil seguir velando por la transparencia.