El edil nacionalista Adolfo Varela, y la directora del CURE-Maldonado, doctora Estela Delgado, aunque con distintos enfoques, coincidieron en que el edificio de la alta casa de estudios sufrió problemas serios desde su concepción, aunque eso no significa que hoy la estructura o alguna parte corran riesgo de derrumbe.
Varela, el pasado martes puso el tema encima de la mesa y lo más importantes es que ha quedado al desnudo lo que ocurrió con la empresa Transamerican, la que originalmente estaba construyendo el edificio y por incumplimientos y deficiencias, tuvo que indemnizar a la UdelaR.
La pregunta que ha surgido tras el estallido de la polémica hace dos días, es quién fue el profesional o los profesionales responsables de controlar una obra de semejante envergadura que se habilitó sin estar terminada, pero además, con una serie de defectos en su estructura.
El edil Adolfo Varela, entrevistado en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, recordó que la Intendencia de Maldonado aportó $ 25 millones para esa obra, además de haber aportado la tierra, por lo cual allí hay una inversión que es de todo Maldonado.
Sostuvo que el informe técnico en el que basó su exposición-denuncia del pasado martes en la Junta Departamental, es público, y que si bien se realizó hace dos años, tiene plena vigencia por cuanto en el edificio del CURE-Maldonado, aún siguen las obras y no hubo otro posterior.
Recordó que además, hay fotografías que son elocuentes de los problemas estructurales denunciados, y coincidió con las autoridades de la alta casa de estudios, en que la responsabilidad fue de la empresa originalmente contratada: Transamerican.
Adolfo Varela, insistió en que la situación es delicada -más allá de que en este momento trabaja una empresa especializada- y que nadie puede negar lo que dice el informe elaborado por los técnicos dos años atrás, respecto a los problemas en la construcción.
Finalmente, se preguntó porqué cuando se detectaron los problemas y se decidió rescindir el contrato con Transamerican, se autorizó el inicio de las actividades educativas y académicas en el edificio que presentaba defectos, y aún no estaba terminado.
La directora del CURE-Maldonado, doctora Estela Delgado, explicó que hace dos años efectivamente se detectó que “la empresa no estaba haciendo bien las cosas” por lo cual se detuvieron las obras que aún estaban sin concretar en uno de los sectores del edificio.
Reveló que en aquel momento la UdelaR tenía dos caminos: ir a juicio contra la empresa Transamerican o llegar a un acuerdo extrajudicial; esto último fue lo que se logró porque la constructora aceptó abonar como indemnización, una suma que estimó entre los 13 y 17 millones de pesos.
Con esa indemnización se costearon los gastos para el nuevo llamado a licitación, que recayó sobre ARCO, una empresa “especializada en patologías de hormigón”, la que se encuentra trabajando desde septiembre del año pasado y continuará haciéndolo durante unos dos meses más.
En aquel informe del año 2014, los técnicos establecían que si bien los problemas no eran graves de momento, de no realizarse mejoras, en el futuro podrían surgir problemas de más envergadura. A partir de ese momento comenzó la nueva etapa sin interrumpir la actividad.
La doctora Delgado descartó que en ocasiones haya que movilizarse dentro del edificio usando casco de seguridad, y aclaró que fue una propuesta de AFFUR (Agremiación Federal de los Funcionarios de la Universidad de la República), que se tomara la medida de tener esos elementos a disposición ante cualquier necesidad.
En el mismo sentido, dijo que hay zonas valladas en las que no se realiza ninguna actividad, porque precisamente la circulación está prohibida en tanto se llevan adelante las obras. Por otra parte, confirmó que hay visitas semanales de una prevencionista y de técnicos que evalúan los trabajos.
La jerarca, finalmente reconoció que los problemas originales fueron producto de la falta de controles adecuados, lo que fue motivo de una profunda autocrítica dentro de la propia Universidad de la República. Este año la sede Maldonado del CURE, espera superar los 1.000 alumnos.