Los océanos cubren más del 70% del planeta y son fuente de vida y sustento de la humanidad y de todos los demás organismos de la tierra. Prueba de ello es que el océano produce al menos el 50% del oxígeno del planeta, alberga la mayor parte de la biodiversidad de la tierra y es la principal fuente de proteínas para más de mil millones de personas en todo el mundo.
En el Día Mundial de los Océanos, este año se vuelve a resaltar su importancia porque, entre otras cosas, producen la mitad del oxígeno del planeta. Además resultan claves para la economía, ya que se estima que, para 2030, habrá en torno a 40 millones de trabajadores en todo el sector relacionado con los océanos.
Sin embargo, a pesar de todos sus beneficios, necesita más apoyo que nunca. Con el 90% de las grandes especies marítimas de peces mermadas y el 50% de los arrecifes de coral destruidos, se está extrayendo más de los océanos de lo que se puede reponer, por lo que se debe trabajar para crear un nuevo equilibrio.
El Día Mundial de los Océanos recuerda a todos su importante papel en la vida cotidiana. Son los pulmones del planeta, una fuente importante de alimentos y medicinas y una parte fundamental de la biosfera. El propósito este 8 de junio es informar sobre el impacto de los humanos en el océano.
El problema de las corrientes
Un reciente estudio publicado en la revista Science Advances (según National Geographic España) revela que el efecto de calentamiento de la superficie del mar, provocado por el cambio climático antropogénico, acelera las corrientes oceánicas superiores en el 77% del océano global.
Estas corrientes, que son movimientos horizontales del océano con rutas concretas, son impulsadas por el viento, por las diferencias de densidad en el agua en función de la temperatura y salinidad de las regiones oceánicas, y por las mareas, pero además, cumplen funciones básicas.
A través de las corrientes se produce el transporte de nutrientes necesarios para la supervivencia de muchos organismos, o la eliminación de carbono y el calor de la atmósfera. Pero Los cambios que se están produciendo a causa del calentamiento global impiden que se cumplan estas funciones.
En este sentido, es importante recordar que, al igual que sucede con los residuos, el calor también va a parar a los océanos: estos absorben alrededor del 90% del exceso de calor que produce el mundo y el 25% de la contaminación por carbono, lo que explica que la temperatura del mar haya batido su récord en abril de 2023, con 21,1ºC de media.