Este martes 18 de febrero, se llevó a cabo en el salón comunal de Punta Negra la Mesa de Diálogo Ambiental Zona Oeste: Cerro Pan de Azúcar, encuentro convocado por la Asociación Pro-Conservación del Cerro Pan de Azúcar, Punto Verde, Comisión Vecinal Punta Negra, Red Ambiente Piriápolis y Alrededores y Naturalmente Piriápolis y Zona Oeste.

El encuentro celebrado en Punta Negra, contó con una amplia participación ciudadana, y la oratoria a cargo de Camilo Abreu y Manuel Arsuaga, integrantes de la Asociación Pro-Conservación del Cerro Pan de Azúcar, quienes detallaron el largo proceso de investigación que contó con la colaboración de técnicos y expertos.

El objetivo fue presentar la propuesta de ingreso del cerro Pan de Azúcar al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP). Allí se destaca el valor del cerro, su importancia en biodiversidad, las especies prioritarias para la conservación que alberga, su importancia para la cuenca de la Laguna del Sauce, hasta sus particularidades arqueológicas.

Los expositores así como los vecinos, compartieron y resaltaron la necesidad y urgencia de incluir al cerro Pan de Azúcar en el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, argumentando que esta medida es vital para preservar tanto la biodiversidad como el patrimonio cultural y natural de toda la zona.

Asimismo, se discutió el polémico proyecto de instalación de un teleférico, se hizo un resumido análisis de pliego de condiciones y la licitación pública vigente, y se realizaron distintos aportes. Según algunos participantes, este tipo de proyecto podría generar impactos irreversibles en el ecosistema si no se gestionan correctamente.

Uno de los puntos claves en los que se trabajó, fue la importancia que el proyecto del teleférico pase por el Ministerio de Ambiente con un adecuado estudio de impacto ambiental, riguroso, y que cumpla con todas autorizaciones correspondientes, además de contar con la participación ciudadana.

La comunidad y los representantes de las organizaciones participantes, expresaron su preocupación ante el posible aumento del turismo masivo y la consecuente presión sobre un entorno ya vulnerable por lo que se hace un llamado a las autoridades para que revisen los procedimientos y plazos de la licitación.