La jueza penal de 10° turno de Maldonado procesó a la pareja de jóvenes que la madrugada del domingo chocara violentamente un móvil policial de la seccional 6ª de Maldonado Nuevo, provocándole diversas lesiones a dos policías. El conductor fue imputado además por simulación de delito. 

El caso, del que informara ampliamenteMaldonadoNoticias, terminó con el procesamiento sin prisión de Darío Waldemar Tolosa Mena, de 20 años de edad, imputado por los delitos de omisión de asistencia y simulación de delito.

Este joven fue el que tomó las llaves de una camioneta utilitaria de su suegra, y salió desde una casa del barrio Kennedy en dirección al 14 de Febrero, acompañado por su novia, Y.D.D.R., de 18 años de edad, hija de la dueña de la camioneta.

La joven, que en todo momento negó haber participado en el robo del utilitario de su propia madre, también fue procesada sin prisión por el delito de omisión de asistencia. Ambos, deberán cumplir arresto domiciliario nocturno por 30 días.

Inventaron un robo

Como lo consignara en carácter de primicia MaldonadoNoticias, la unidad policial se encontraba realizando tareas de patrullaje, cuando sobre las 3.30 de la madrugada del domingo, en las calles Manuel Oribe y Francisco Lavalleja, fue chocada violentamente una camioneta.

El impacto fue de tal magnitud, que el móvil fue arrastrado al menos 20 metros con múltiples daños, principalmente en su lateral derecho, y la dotación presentando diversas lesiones. La funcionaria policial que viajaba como acompañante, entre otros golpes, sufrió fractura de tabique nasal.

Quien conducía la camioneta utilitaria, Darío Waldemar Tolosa Mena, confesó al ser detenido que se asustó porque había chocado una unidad policial, por lo que decidió alejarse raudamente del sitio de la colisión. Su novia lo acompañó en la decisión.

La camioneta Chaná de color azul, fue ubicada perfectamente estacionada a media mañana del domingo en una calle del barrio Presidente Kennedy, con claros signos del impacto en su parte delantera, e incluso trozos de pintura de la unidad policial.

En tanto luego se supo que, sobre la hora 7.30, una mujer domiciliada en el citado barrio, se presentó ante la sub comisaría de San Rafael a denunciar el robo de la camioneta, ocurrido horas antes del frente de su casa. Allí se realizaba una reunión familiar.

Durante las investigaciones, se pudo establecer que la dueña de la camioneta, poco después de la hora 2.00 de aquella jornada, se retiró de su casa acompañada por su pareja y una amiga. Fueron en auto a un local bailable del centro de Maldonado.

En su casa, quedaron su hija de 18 años y el novio de esta de 20, quienes decidieron tomar la camioneta utilitaria para dirigirse al barrio 14 de Febrero donde se domicilia el joven. A mitad de camino fue que se produjo el violento choque.

A pesar de que la chica negó haber participado en los hechos, insistiendo en que ambos se habían acostado, y alguien ingresó a la casa a robar las llaves de la camioneta de su madre, su novio confesó la verdad y dio una versión totalmente diferente.

La versión de que la camioneta fue robada por desconocidos, se desvaneció desde el principio. En el patio de la casa hay dos perros pitbull por lo cual difícilmente un extraño ingresara a tomar las llaves y menos en horas de la madrugada.

Además, tras el choque contra el móvil policial, la pareja retornó al barrio Kennedy y se acostó a dormir, dejando la camioneta a unas cuadras; pero la llave de la misma apareció en la casa, por eso su dueña denunció que habían usado llaves apropiadas.