*) Ec. Pablo Broder

Han cobrado actualidad en estos días, varios debates sobre la crítica situación del país, mucho más allá de las consecuencias de la pandemia.

Uno de ellos radica en el incierto curso de la negociación con el FMI. A su vez, la insistencia del gobierno nacional para involucrar a la oposición en la convalidación del curso de acción -ignorado aún- trazado por el oficialismo con el organismo internacional, ya en los albores del default en caso de no concretar un acuerdo.

Ante el cúmulo de afirmaciones, reclamos y medias verdades, se ha generado una nebulosa que oculta el hecho que el camino que emprendió la Argentina actual conduce inevitablemente a un precipicio, situación muy grave de la que costará mucho emerger.

Resulta preocupante además, que aparentemente la mayoría de la población no haya tomado adecuada conciencia, tanto sea de la dimensión del problema, como del oscuro decurso que lleva la marcha de los acontecimientos y sus consecuencias, las que tarde o temprano aparecerán, como cada vez que tocamos fondo, a despecho de aquellos que sostienen que la Argentina siempre recuperó su línea de flotación en sus instancias más graves.

Lamentablemente no nos resulta posible compartir ese optimismo, y el camino descendente nos podría estar llevando a los peores momentos que ha vivido el país en su era democrática, presunción agravada por el espejo de destrucción nacional ocurrido en regímenes tan caros a los afectos oficialistas, como Venezuela, Cuba o Nicaragua, entre otros.

Muchos analistas nacionales y extranjeros, están señalando que en la negociación con el FMI se acercan horas decisivas, que culminarán inexorablemente en acuerdo o default. Ya el tiempo se agota.

Las incomprensibles dilaciones oficiales, explicables únicamente por la evidente disparidad de criterios en el escenario de las decisiones, lamentablemente se han traducido  en inversión perdida, destrucción de empleo y licuación de reservas, junto a una tasa impensable de riesgo país.

El problema de la oposición y también de la sociedad argentina es que el gobierno se resiste a exhibir un plan económico, pues simplemente, aun no parece existir. Asimismo, aun de lograrse el imprescindible  acuerdo con el Fondo, no por ello se dejará de ser récord en inflación, pobreza, avasallante presión impositiva y desocupación, entre otras calamidades.

No obstante, de caer en el default el drama sería mucho mayor. No sólo convertiría al país en un paria financiero internacional, con sus reservas exhaustas y con China y Rusia como únicos aliados poderosos. También se perdería la posibilidad de obtener algún tipo de beneficios de organismos financieros supracionales, a la vez que se dificultaría al máximo la gestión para el sector privado en su necesaria apelación a la financiación internacional.

En este contexto, no resulta desatendible una importante novedad en el escenario político: la vigorosa aparición del discurso antipolítica. Evento éste no despreciable observando los últimos actos electorales en países muy cercanos, alimentado por el cumulo de desaciertos de la gestión gubernamental y por sus muestras de desconocimiento de  las reglas del juego del sistema republicano que le permitió acceder al poder.

Nada ayuda en este escenario que, mientras se busca el favor de los Estados Unidos para llegar a un acuerdo con el FMI, la presencia del embajador argentino en Managua, y el hecho de haber compartido ese acto con  uno de los iraníes acusados de organizar el máximo atentado sufrido por el país, constituye una aberración política y una inmoralidad.

A la vez, la falta de respeto hacia las  formas democráticas y la división de poderes, aun cuando no constituyan  un dato nuevo en el régimen gobernante son también señales que muestran la inevitabilidad de una doble posibilidad: la inminencia de una crisis profunda, o conducir al país, hacia un destino muy oscuro.

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Javier Claure Covarrubias

“Dicen que siempre me gustaba la música. Cuando tenía dos años, mi padre solía venir a mi cuarto y tocaba su violín para que yo me quedara dormida. Me gustaba mucho las melodías que salían de ese armonioso instrumento. Y me cuentan que solía levantar la cabeza, con los ojos bien abiertos, para escuchar música. Mi padre estaba convencido de que la música sería mi destino.

Pero la música no jugó un papel importante en mi vida. A mí más bien me fascinaba el ballet. Recuerdo muy bien que una vez estaba de pie, en mi cama, mirando a la pared del frente, en donde se mostraba una escena de bailarinas de ballet. Desde entonces empezó mi interés por el ballet.

De niña era tranquila y no me importaba jugar sola. Dicen que era muy sensible y que me impresionaba mucho el sufrimiento de otras personas. Mis padres solían llevarme a pasear por los bellos bulevares y parques de Moscú. Yo tendría unos diez años en ese entonces. Un cierto día, por casualidad, entramos a una iglesia y vi un crucifijo con un hombre clavado. Me entró mucha curiosidad y pregunté quién era ese hombre con clavos en los pies y en las manos.

Una persona que estaba a mi lado me contestó: “Jesús, el hijo de Dios”. Y que lo habían crucificado porque otra gente odiaba lo que él predicaba y, además, no creían que era el hijo de Dios. Todo eso me causó pánico y me puse a llorar.

Cuando llegamos a casa, mis padres estaban afligidos porque me sentía muy triste. Me llevaron a la cama y me leían cuentos de hadas, hasta que finalmente quedé dormida. Mi padre era checoslovaco de nacionalidad. Había llegado a Rusia en 1892 y tenía algunas dificultades porque era católico. Se conoció con mi madre, Elena Alexándrovna, y más tarde decidieron casarse. De esa manera obtuvo el permiso de residencia. Mi madre rusa, costurera de profesión, nunca quería hablar de su familia, hasta que un día descubrí que mi abuelo, Michail Alexándrovna, fue echado de su familia porque decidió casarse con mi abuela, una mujer que no pertenecía a la aristocracia.

Mi familia me contaba que mi abuelo materno era un gran violinista y pertenecía a la orquesta filarmónica del Teatro de Bolshói. Murió en 1876 a consecuencia de una pulmonía y después de algunos años mi abuela también murió. Mi madre se crio, entonces, con una familia de comerciantes ricos. En Rusia era una costumbre que la gente de dinero se haga cargo de ciertos niños huérfanos. A los niños se les enseñaba un oficio y a las mujeres a encontrar un buen marido.

En marzo de 1914 fuimos a visitar a una tía que vivía en Bogorodskoe, una aldea a unos 200 kilómetros de Moscú. Mis padres tenían una casa de campo allí. Una noche me desperté a causa de intensos ruidos. Me asomé a la ventana y vi que algunas de las casas, a nuestro alrededor, ardían en llamas. Unos hombres andaban buscando extranjeros, especialmente alemanes y judíos. Por suerte teníamos una empleada en la casa, cuyo nombre era Valentina. Una mujer rusa.

Ella defendió nuestras vidas esa noche. Salió al balcón con un icono en la mano y su novio que pertenecía al ejército ruso. Les gritaba a los malhechores que mi madre era rusa y mi padre checoslovaco. Y que, además, éramos cristianos grecos-ortodoxos. De esa manera nos dejaron libres y decidimos volver a Moscú. Nos fuimos en tren, pero apenas llegamos a destino, nos dimos cuenta que la situación estaba peor.

Habían quemado casas y negocios que pertenecían a extranjeros. Un día paseando por Moscú, anunciaban que Vladimir Lenin iba a dar un discurso. Yo tenía 15 años, y no entendía muy bien el porqué de tanto desorden social. A pesar de esta falta de conocimiento fui a escuchar las palabras de Lenin. Cuando lo vi, me impresionó bastante aquel hombre pequeño que hablaba con una voz delgada. Decía las cosas con gran seguridad, pero me molestaba cuando hablaba caminando de un lado para otro, con una mano en el bolsillo y con la otra gesticulando.

La vida se iba haciendo difícil; hasta que finalmente, en 1917, estalló la Revolución. Por aquel entonces, estudiaba en el colegio “Winkler” de Moscú. Un colegio de élite para extranjeros. Había un caos tremendo en Moscú. Los depósitos de trigo y centeno fueron incendiados. La comida y las medicinas escaseaban. Las colas para comprar alimentos eran inmensas. Cada persona llevaba un número en la espalda y realmente era asombrosa la paciencia de los moscovitas.

Mucha gente hacía cola hasta dos días y el pan que se recibía no era de buena calidad. Existía mucha hambre en el pueblo. Mis padres tuvieron que vender sus joyas y otras cosas de valor para poder comprar comida. Me acuerdo que hacía un frío tremendo y para mantener caliente nuestro departamento tuvimos que quemar, en la estufa hecha por mi padre, algunos muebles de madera. Así pudimos sobrevivir”.

Esta historia fue contada por una mujer que nació en Moscú. Su hija, una viejecita rusa culta, que murió hace tiempo era mi vecina y me entregó unas hojas que su madre había escrito en inglés. Hojas ilegibles, ajadas, amarillentas y manchadas por el tiempo. El relato que leen arriba es lo que pude rescatar de ese testimonio. Su madre descansa bajo el cielo de Moscú, y ella está enterrada en algún cementerio de Estocolmo.

*) Es poeta y sociólogo boliviano. Nació en Oruro, capital folklórica de Bolivia. Es miembro del Pen-Club Internacional, de la Unión Nacional de Poetas y Escritores de Oruro (UNPE), de la Sociedad de Escritores Suecos, del Movimiento Poético Mundial (World Poetry Movement), del Liceo Poético de Benidorm (España) y miembro de número (300-ES-026) de la Academia Norteamericana de Literatura Moderna, Capítulo España.

Ejerce el periodismo cultural. Ha estudiado informática en la Universidad Real de Tecnología de Estocolmo (Kungliga Tekniska Högskolan) y en la Universidad de Uppsala (Suecia). También estudió matemáticas en la Universidad de Estocolmo, casa de estudios donde además obtuvo una Maestría en Pedagogía y una Licenciatura en Sociología.

*) Fabián Manise

Además de la pandemia por el Covid-19 y sus variantes que estamos viviendo, según INUMET hemos soportado olas de calor sin precedentes, situación que nos impone tomar las precauciones debidas en lo individual y hacer lo propio con las plantas en general.

Atento a esto último, el jardín y la huerta pueden verse afectados por la insuficiencia de agua y la aparición de distintas plagas. Si bien es cierto que existen plantas que aguantan sol y calor, las altas temperaturas y la acción continua del astro rey pueden secarlas e incluso hacer que mueran.

Es imperioso entonces procurar que el agua nunca falte, concretamente en las zonas de tierra más áridas, adoptando medidas tales como regar a primera o última hora del día, para evitar que el agua se evapore rápidamente y a la vez cuidar que el caudal no forme charcos que posibiliten que las raíces se pudran.

Tener en cuenta asimismo que los ejemplares en macetas, necesitan de más agua que aquellas asentadas en el suelo ya que éstas retienen más la humedad y los nutrientes del sustrato de los canteros. Un truco para impedir que las macetas expuestas al sol durante algunas horas del día absorban mucho calor, colocarlas en el interior de un contenedor más grande para que éste sea quien reciba la mayor temperatura y el primero quede protegido.

Muchas plantas como los helechos, violetas africanas y las llamadas púrpuras entre otras que necesitan que el ambiente y el sustrato se mantengan húmedos durante todo el día, suele ser una solución el ubicar las macetas sobre platos con agua.

Un método muy utilizado para retener un poco la humedad del sustrato es la ubicación de pequeñas rocas en su superficie. Este mantillo rocoso es capaz de prescindir de algunos días de riego y obtener la ventaja que no habrá de difundirse el calor a las raíces.

Las macetas de barro sin duda son especiales para cultivar plantas pero tienen una característica que puede afectarlas en el verano. Este material transpira la humedad de la tierra con rapidez que junto a las altas temperaturas, terminarán secando el sustrato aún más rápido.

Es aconsejable entonces, trasplantar aquellos ejemplares que necesitan mantener un poco la humedad de la tierra a vasijas plásticas; también se puede introducir dichas macetas en similares de plástico más grandes, rellenando los espacios vacíos con sustrato.

En cuanto a las plantas de exterior es aconsejable, no ubicarlas cerca de las paredes pues éstas irradian el calor. Buscar un lugar de semisombra y de no ser posible recubrirlas con una malla oscura que actúe de filtro y evitar así que los rayos del sol penetren en las hojas.

Otra opción es la creación de microclimas; como ser la presencia de árboles o grandes arbustos, estanques, etc., y en caso de terrazas o balcones, a través de la colocación de varias plantas en una misma maceta. En otro particular, prestar especial atención a las hojas y flores marchitas, pues esto puede denunciar una posible enfermedad o plaga.

En el caso de los ejemplares de los canteros, es recomendable formar sobre el suelo un acolchado de materia orgánica, como cortezas de pino, grava o restos de poda. Este acolchado cumple varias funciones beneficiosas, desde retener la humedad del suelo y evitar que este se recaliente, hasta limitar las malas hierbas y añadir un valor estético al conjunto.

Tener en cuenta que durante la presente estación, es cuando casi todas las plantas necesitan una mayor cantidad de nutrientes debido a que están en su etapa de floración. Es así que se deben aplicar más abonos y fertilizantes que en el resto del año. La cantidad y el tipo, dependerán de cada especie, pero conviene tenerlo en cuenta para que los ejemplares, además de que no sufran en exceso la sequía y las altas temperaturas, también otorguen al hogar toda su belleza.

Hasta aquí amigos algunas recomendaciones para paliar los efectos del calor y el sol sobre nuestras plantas. Recuerden que cualquier consulta pueden hacerla a través de mi correo electrónico Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla. que con gusto responderé.

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) Ec. Pablo Broder

El año que finalizó constituyó una muy dura prueba para todos los argentinos.

A los rigores y consecuencias de la pandemia que aún no ha terminado se le debe sumar la precariedad del orden político y social dentro del cual se despliegan nuestras vidas.

El oficialismo continuó con su marcha a contramano de las instituciones, mientras que la oposición se dejó arrastrar por pujas internas, produciendo en no pocos de sus votantes una lamentable decepción.

Es en este escenario donde la Argentina muestra una ausencia de aquellos temas que son fundamentales para el devenir de la población y por otra parte ocupan la discusión política, aspectos que hacen exclusivamente a los particulares intereses de la clase política, en especial la gobernante.

En este último caso, toman el centro de la escena, por ejemplo, el increíble proyecto de eternización de los intendentes de la provincia de Buenos Aires, la creación reiterada de nuevos impuestos, que gravan fundamentalmente a la clase media, fallos de la Justicia consagrando la impunidad de la corrupción, o la falta de definición del gobierno por acceder a un imprescindible acuerdo de refinanciación con el FMI, luego de zigzagueos altaneros, todo ello en un escenario donde el riesgo país supera los 1.750 puntos básicos, un nivel que quintuplica el promedio de Latinoamérica (excluida Venezuela).

En cambio, el escenario político-social de la Argentina padece de un atronador silencio respecto de cuestiones que hacen no solo a su presente, sino fundamentalmente a su futuro, ausentes en el debate público, como, entre otras, las siguientes:

- La Argentina se ha transformado en un país con una enorme proporción de su población que no trabaja. No solo por las merecidas jubilaciones para muchos, sino por el festival impúdico, utilizado políticamente, de los llamados planes sociales, además de las designaciones cuantiosas en el empleo público con fines partidarios. Una sociedad con esta característica corre peligro de constituirse en inviable.

- La educación en crisis. Los índices internacionales dan cuenta de la involución del sistema educativo, tomado como coto de caza por una maraña sindical, y que compromete en forma muy severa el futuro de los jóvenes argentinos, y del país en su conjunto.

- La inseguridad creciente en todo el país, y el auge del narcotráfico.

- La carencia de explicación del uso de los fondos públicos para actos con fines exclusivamente partidarios.

- La ocupación diaria del espacio público, sean puentes, avenidas o plazas, por manifestaciones multitudinarias que impiden el desplazamiento de la ciudadanía pacifica que, a diferencia de los manifestantes, debe y quiere trabajar.

- La agresión a las nuevas compañías aéreas. La Argentina es un territorio extenso donde la comunicación aérea es fundamental. Desde la bienvenida aparición de las denominadas aerolíneas “low cost”, estas han sufrido permanentes ataques por parte de aquellos que se adueñaron de Aerolíneas Argentinas, para transformarla en un mecanismo de ocupaciones espurias y generadora de un drenaje de fondos públicos.

En los últimos días, ante la bienvenida política de tarifas promocionales de esas empresas, increíblemente, el gobierno decide impedirles su aplicación. Una vez más hubo silencio frente a este atropello, propinado también contra la ciudadanía usuaria de esos servicios.

La ausencia de todas estas cuestiones en el centro de la discusión pública, a excepción del abordaje que realiza la reconfortante prensa libre aún vigente en el país, es un claro índice de la falta de rumbo de una sociedad entristecida o resignada a la carencia de proyecto común.

Quiera el futuro que las dirigencias asuman la necesidad de modificar, para bien de los argentinos, este no alentador escenario de temática inconducente por un lado, o de silencios lamentables.

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Mag. José Luis Corbo

Y si se trata de explicar el mundo o, mejor dicho, de explicar la sociedad en su conjunto, es probable que encontremos tantas explicaciones como personas. Esto lo hemos repetido hasta el cansancio. Por lo pronto trataré de describir algunas tesis que, a día de hoy, parecen por lo menos irrefutables.

En primer lugar comenzaremos por afirmar, como decía un gran filósofo, que cada sujeto se encuentra asociado a una trama de relaciones productivas con las que se vincula de forma involuntaria. Tiempo y espacio nos ubican en el movimiento de una trama productiva y nos someten a relaciones de las que comenzamos a participar casi sin percibirlo.

Esto no quiere decir, de ninguna manera, que ese condicionamiento represente la cosificación de lo inamovible, la estructura sometiendo al agente o como le quieran llamar, sino todo lo contrario. El hombre produce su vida, y en ese producir se suceden relaciones que asocian a los hombres entre sí, generando dependencia, relaciones productivas que ubican a los sujetos en la trama y le asignan roles, los que estarán condicionados por el lugar de la trama en el que cada uno de los sujetos se ubique.

La forma en que el mundo productivo fluye moldea labores y construye oficios, tareas, trabajos que se acoplan al total de la maquinaria productiva y que imperceptiblemente asignan lugares a cada sujeto productivo. Lo real es que en general, en una sociedad, todos dependemos de todos. La complementariedad de las tareas define la sociedad y la sociedad dialécticamente define las tareas.

Ahora bien… Está claro que no es tan sencillo elegir en qué lugar de la trama productiva me ubico. No es tan fácil como creíamos de niños y no puedo elegir así como así ser astronauta o bombero. Mucho más difícil es ser empresario o gerente de una empresa, salvo que…

Salvo que el lugar que ocupe el sujeto en la dinámica de clases lo ubique ahí sin necesidad de que suceda nada raro. Lo raro sería, por ejemplo, que aquella movilidad social de la que hablaba Stiglitz, y que ronda el 9 %-y no mucho más-, se apiade del obrero y lo habilite a cruzar al otro lado de la brecha.

Lo “no raro”, por otra parte, sería que el hijo del empresario sea empresario y que el del obrero sea obrero, porque el 91% restante que mencionaba en sus estudios Stigliz, no se mueve ni a palos. La herencia sigue siendo el principal factor de riqueza en el mundo desde que existe la propiedad privada, y eso no lo cambia nadie.

Y no solamente se hereda dinero y propiedades, sino que el capital como trabajo acumulado -diría Bourdieu- también habilita a que se hereden cargos, lugares de acceso, relaciones personales y hasta amistades… en fin, hasta los gustos se heredan.

Pero a la luz de esta lógica, podrían decirnos que no hay muchas salidas posibles y caeríamos indefectiblemente en perspectivas funcionalistas que simplemente describen lo inevitable de la reproducción o podríamos, como sugiere también Bourdieu desde aquel poema de Robert Desnos, comernos ese huevo al plato y evitar que siga naciendo el mismo pelícano una y otra vez. Los problemas del sistema productivo se resuelven cambiando el sistema, algo que suena sencillo pero que no viene resultando así.

Y en el desdén que el propio sistema nos genera y como la base material configura la conciencia y el pensamiento, todos parecemos apelar al sálvese quien pueda. Todos queremos ser exitosos dentro del mismo sistema sin cuestionarlo. Queremos ser empresarios, profesionales, inversores, emprendedores o lo que se les ocurra, con la esperanza de entrar al 9 % que se cambia de franja.

Pero no es tan fácil decidir qué ser en la vorágine neoliberal cuando los ejemplos prácticos no están tan claros y cuando el dispositivo hermenéutico que cada sujeto desarrolla lo habilita solamente a lecturas sesgadas del mundo. Es decir cuando todos nos creemos saber mucho sobre el mundo cuando en realidad no sabemos nada.

A modo de ejemplo, podríamos describir lo que sucede cuando pedimos a un adolescente de clase obrera que estudie. En el mayor de los casos, aquel que no tiene intenciones de hacerlo dirá que el estudio no garantiza nada, apelando a la anécdota de un amigo de un amigo que estudió y que no tiene demasiado trabajo y que si no fuese por una renta de unas casitas que le dejaron los padres no viviría dignamente. Anécdota equivocada, si vive de rentas trabajando poco no está en tu barco, simple y sencillamente porque es heredero. Es decir que vive de lo que le dejaron y eso ya lo ubica en otro lugar que no es el tuyo.

Si, por otra parte, tenemos la suerte que ese adolescente decide estudiar, que no nos caiga con la historia del amigo que estudió y trabaja sólo de cuatro a seis horas. Es probable que ese amigo, cuando volvió de la capital ya tenía su estudio armado, o ya tenía su cargo digitado o, en el mejor de los casos, hasta puede haber heredado el cargo de su papá o su mamá.

Por otra parte y en el otro lado del discurso, encontraremos aquellos que nos dicen que Juan es empresario y que ni siquiera terminó el liceo, y que es muy exitoso sin necesidad de romperse la cabeza. Está claro que de esos también los hay, pero la mayoría viene con diez millones o más que le dejaron los papás, y construir el edificio cuando ya tienes diez pisos prontos, es por lo menos más sencillo.

El año pasado, sin ir más lejos, la FUCVAM editó un libro que recopila numerosas investigaciones sobre la riqueza en nuestro país. Al igual que lo hicieron Bourdieu y Passeron en los 60, nuestros investigadores comprobaron que la herencia es la base de la riqueza en nuestro país y que esa base material, ese ser social, configura la totalidad de las acciones y del pensamiento de los sujetos. Los de arriba se casan con los de arriba y los de abajo con los de abajo, lo de los príncipes y las cenicientas sigue siendo ficción, básica y vulgar.

Por otra parte, y no nos cansamos de repetirlo, desmitificar el voluntarismo y las posibilidades de movilidad que ofrece el esfuerzo, es una cuestión educativa. Hay quienes se esfuerzan muchísimo y siguen en el 91 % de los de abajo que no se mueven. Redistribuir la riqueza, eliminar la explotación del hombre por el hombre, desmitificar las bondades capitalistas y las teorías del derrame es obra de todos. O por lo menos así debería serlo si queremos ser productores reales de nuestra sociedad.

 

*) Licenciado en Educación Física. Magister en Didáctica de la Educación Superior. Posgrado en Didáctica de la Educación Superior. Actual Director Coordinador de Educación Física de CEIP Maldonado.

Integrante de la línea "La Educación Física y su Enseñanza" adscripta al grupo “Políticas Educativas y Formación Docente. Educación Física y Prácticas Educativas”.

*) Fabián Manise

 

Con motivo de las festividades de fin de año y comienzo de una nuevo, no pueden faltas las plantas alusivas como la Poinsettia conocida popularmente como Estrella federal o Flor de Pascua.

Si se toma la decisión de comprarla tanto en un centro de jardinería o en un vivero, es menester tener en cuenta detalles tales como: presencia abundante de flores y capullos de color amarillo verdoso, signos elocuentes que la planta es fresca. Las hojas deben exhibir un conjunto compacto, exentas de restos de polen pues ello significa que la maduración del ejemplar ha cumplido su ciclo.

Para asegurarnos que el follaje está completo y bien estructurado, basta con dar un pequeño golpe en los laterales de la maceta, provocando que la planta se sacuda, si las hojas se mantienen en su sitio, es que está en óptimas condiciones. Por el contrario, si se le caen, es que no se encuentra en su mejor momento.

Una vez en la casa, tener en cuenta que esta planta no soporta bien las corrientes de aire o el frío, pues ello puede hacer que pierda sus hojas. Se la debe regar en forma regular, cuidando de no encharcar el sustrato.

Otro de los ejemplares típicos de la época, es el Cactus de Navidad, de Acción de Gracias, de Pascua o de Santa Teresita y cuyo nombre científico es Schlumbergera. Su procedencia es de las zonas tropicales de Brasil, es una planta epifita, es decir vive sobre otros árboles, tiene una forma foliosa (muchos tallos) con una base carnosa y cilíndrica que  a medida que  va creciendo se torna plana.

A diferencia de otros cactus que soportan bien el sol del verano, necesita humedad para sobrevivir, suele colocárselo en el interior de las viviendas, recibir luz pero no directamente. Para crecer sano y que no se marchite, necesita estar expuesto a una temperatura entre 10º y 25º C. En invierno más de 16º C, y vaporizarlo de vez en cuando.

En cuanto al hábito de riego, vale tener en cuenta que debe recibir agua una vez a la semana en verano; mientras que en invierno y otoño cada quince días. Cuidar que no se acumule agua en la maceta y comprobar que el sustrato está seco antes de repetir la acción.

Otro dato a tener en cuenta es el abono. Para dar vigor al cactus, es aconsejable mezclar con el agua un producto con quelatos de hierro y si se desea favorecer la floración, aplicar de forma regular un fertilizante muy rico en fósforo y potasio.

Otra característica a destacar, es que tiene un crecimiento lento, así que no hará falta que se le cambie de maceta hasta más grande, aproximadamente cada tres años y en primavera. De todas formas, si se observa que no crece o que las raíces salen por los agujeros de drenaje, es una señal que necesita un contenedor mayor.

Es una especie muy bonita para colocarla en soportes o cestas suspendidas, ya que los tallos con flores tienden a caer y que se pueden aprovechar para hacer esquejes o trasplantar al jardín durante el resto del año. No obstante lo explicitado, la vedette de las fiestas tradicionales en Uruguay lo constituye sin lugar a duda el Jazmín del Cabo o Gardenia jasminoides.

Las flores tienen un aroma exquisito que se reconocen a lo lejos y la planta luce por el brillo de su follaje. En el exterior puede cultivarse en forma solitaria o en un cantero como arbusto de altura aunque también prospera en macetas, preferentemente de buen tamaño, en terrazas o en balcones iluminados.

En verano es ideal que no reciba el sol de la tarde a fin de evitar que se quemen las flores blancas, aunque es importante que siempre cuente con buena iluminación. Es bueno podarlo luego de terminada la floración (nunca antes) para que sea un arbusto más compacto y no dejar que se transforme en árbol.

En invierno hay que podar las ramas que han crecido hacia adentro donde no les da bien la luz, pues eso mejora la circulación del aire en la planta y con ello los aspectos sanitarios.

La presencia de cochinilla (insecto que ataca las hojas) y fumagina (hongo) produce un amarillamiento de las hojas y se visualiza como un polvillo negro lo que amerita un tratamiento con aceite emulsionable + insecticida, productos que se aplican en conjunto (también existen otros que son dos en uno).

Se puede aplicar como preventivo una vez en primavera y dos o tres veces en verano. El riego durante la presente estación, debe ser frecuente y abundante.

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) Javier Claure Covarrubias

El jueves 9 de diciembre del año en curso, se llevó a cabo la ceremonia Nobel, dedicada a Abdulrazak Gurnah, en la Biblioteca de Rinkeby. El laureado con el Premio Nobel de Literatura no llegó a Estocolmo a causa de la pandemia de coronavirus.

Desde hace un par de años el proyecto incluye también al sector de Tensta. Rinkeby y Tensta son dos barrios cercanos, dos barrios hermanos situados al norte de Estocolmo en donde conviven familias inmigrantes de todos los países del mundo. Se dice que se habla cien idiomas.

En estos lugares hay problemas de toda índole, pero al mismo tiempo son un ejemplo para el mundo entero porque aquí reina la tolerancia, la comunicación y la comprensión.

Por segundo año consecutivo, precisamente por la pandemia, el acto tuvo un formato reducido. No participaron muchos alumnos. Por lo tanto, no se escuchó el tradicional saludo de bienvenida en diferentes idiomas. Tampoco hubo el desfile de Lucía con cánticos nórdicos navideños.

Gunilla Lundgren, escritora y eterna organizadora de este maravilloso acontecimiento, abrió el acto contando que los estudiantes de Tensta y Rinkeby, durante el otoño sueco, leyeron sobre la vida del químico sueco Alfred Nobel. Pero también dedicaron muchas horas a la lectura de la novela “El Paraíso” y de un extracto del ensayo titulado “Escritura y lugar” del escritor galardonado con el Premio Nobel.

Lundgren, además de contar algunas anécdotas de los Premios Nobel que pasaron por la Biblioteca de Rinkeby, dijo que los alumnos grabaron un video para enviar a Abdulrazak Gurnah. Annelie Drewse, también escritora y flamante colaboradora del proyecto Nobel en Rinkeby y Tensta, se refirió al proceso de trabajo con los alumnos implicados en dicho proyecto. Con ayuda de diapositivas contó algunos detalles sobre anteriores Premios Nobel de Literatura.

Se recordó que muchos escritores y poetas que ganaron el Premio Nobel y que visitaron la Biblioteca de Rinkeby, dijeron que lo más hermoso, de su estadía en Estocolmo durante la semana Nobel, fue justamente la asistencia a la Biblioteca. Y es comprensible porque es un acto repleto de sentimientos, vivencias, poemas, anécdotas, palabras, cantos, etc.

Niños y niñas, vestidos de blanco y con velas en las manos, saludan en diferentes idiomas. Se leen textos del folleto elaborados por los alumnos. Se obsequia a la persona homenajeada una caricatura de su rostro dibujado por algún alumno o alumna, más el folleto Nobel en inglés y en sueco.

Después del acto se comparten momentos agradables tomando un café, un té o un jugo con masitas navideñas y de otros países. Los alumnos conversan con el ganador o la ganadora del Premio Nobel, se sacan fotos y a veces hacen entrevistas.

Es decir, es un ambiente más informal y familiar en comparación con el banquete Nobel y otras actividades que se realizan en torno al Premio Nobel. Durante los últimos trece años he visto con mis propios ojos cómo muchos de los visitantes Nobel se emocionaron profundamente. Y lo más importante: la inspiración que reciben los alumnos para realizar sus sueños. No es imposible que algún alumno o alumna, del Colegio de Tensta o de  Rinkeby, en el futuro pueda recibir el Premio Nobel.

 

*) Es poeta y sociólogo boliviano. Nació en Oruro, capital folklórica de Bolivia. Es miembro del Pen-Club Internacional, de la Unión Nacional de Poetas y Escritores de Oruro (UNPE), de la Sociedad de Escritores Suecos, del Movimiento Poético Mundial (World Poetry Movement), del Liceo Poético de Benidorm (España) y miembro de número (300-ES-026) de la Academia Norteamericana de Literatura Moderna, Capítulo España.

Ejerce el periodismo cultural. Ha estudiado informática en la Universidad Real de Tecnología de Estocolmo (Kungliga Tekniska Högskolan) y en la Universidad de Uppsala (Suecia). También estudió matemáticas en la Universidad de Estocolmo, casa de estudios donde además obtuvo una Maestría en Pedagogía y una Licenciatura en Sociología.

*) Ec. Pablo Broder

En el marco de su acostumbrado doble discurso, el domingo electoral el Presidente pronunció dos mensajes contradictorios en un breve lapso, en los cuales siguen ausentes las temáticas que hacen nada menos que al lamentable estado del cuerpo nacional, acosado por la anomia cambiaria, la desocupación, la caída inexorable del poder adquisitivo, la inexistencia del peso como moneda nacional, el avance de la pobreza y la inseguridad, el terror del narcotráfico y el desorden urbano creciente, producto de las múltiples y cotidianas concentraciones, (que impiden el libre desplazamiento de los pacíficos ciudadanos que necesitan acceder a sus ocupaciones) ante la pasividad de quienes deberían asegurar la vigencia del precepto constitucional de ”transitar libremente el suelo argentino”.

Ocupan el centro de la discusión, en cambio, el silencio y/o las cartas de la vicepresidente, las especulaciones en su torno, las disputas internas en el oficialismo, así como un poco saludable clima con vistas a candidaturas mediante, en el frente opositor, y también el hecho que, con centelleante velocidad, se dispuso la convalidación exprés de 116 DNU antes del recambio en el Senado, algunos de ellos de profunda significación.

Adicionalmente, y quizás fruto de la muy crítica situación de las finanzas públicas, cobró inusitada urgencia en los dichos oficiales, el posible acuerdo (postergado innecesariamente por casi dos años), con el FMI.

El anuncio presidencial en tal sentido, revela la necesidad de evitar que las reservas netas del Banco Central muestren signo negativo en el arranque de 2022 y fuercen un salto del dólar oficial, tras haber sacrificado inútilmente US$ 2.500 millones en los últimos meses, sólo para evitar una estampida del tipo de cambio no oficial previo al acto eleccionario. (La Nación 20-11-21).

La bienvenida toma de conciencia sobre la urgencia en resolver esta crucial encrucijada, a despecho de no tan lejanas expresiones del kirchnerismo contrarias a un acuerdo, se basa en que un default con el Fondo implicaría que la Argentina podría dejar de recibir financiamiento de organismos como el Banco Mundial y el BID, así como cartas de crédito para su comercio exterior, o que por falta de financiación, nuestras padecientes industrias se vean impedidas de importar algunos de sus repuestos e insumos vitales, para proseguir con su actividad productiva.

En este contexto, la imprevisibilidad y falta de coordinación habituales en el modus operandi del gobierno, se acentuó después de las elecciones legislativas. Una prueba es la prohibición del Banco Central para la venta en cuotas con tarjetas de crédito, de pasajes al exterior y servicios de viaje, impuesta de manera sorpresiva, restricción que, al reducirse los vuelos internacionales, afectará también el flujo de viajeros extranjeros, en un momento donde las divisas producidas por el turismo receptivo, serían mucho más que bienvenidas.

En otro orden, y consistente con la obsesión K de búsqueda o creación de cajas, se dio a conocer una insensatez mayúscula cuando el oficialismo, con rapidez, logró hacer aprobar en Diputados el dictamen de un proyecto de ley que crea una tasa de hasta 3% sobre todos los productos envasados, que habrá de impactar en los precios, justo a contramano del discurso oficial de lucha contra la inflación.

Esta iniciativa constituye lisa y llanamente un nuevo impuesto distorsivo y en cascada, que se trasladará a los consumidores. Y fundamentalmente, creará una enorme caja, que analistas ya han estimado entre $ 300.000 y 420.000 millones anuales. No obstante, cabe esperar que, a pesar del apuro oficialista, no puedan lograr su aprobación antes del 10 de diciembre próximo, momento a partir del cual el oficialismo pierde sus mayorías legislativas.

Sería imperioso que la próxima conformación del Congreso Nacional restablezca los necesarios debates sobre las prioridades fundamentales que exige la crítica hora actual, a despecho de las urgencias kirchneristas, ya sean de creación de cajas, como de resguardo de su poder e impunidad.

Quieran los legisladores hacerse eco de esta crítica hora.

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y secretario general de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Alberto Fernando Prandi De Césare

Desde la irrupción del nuevo virus, las autoridades de la Organización Mundial de la Salud han actuado en forma errática, contradictoria y muchas veces equivocada, no siendo capaces de generar certezas y credibilidad en sus dichos y acciones. A modo de ejemplo, afirmaron durante mucho tiempo que se trataba de una enfermedad no letal, como muchos otros virus que la humanidad ya conocía y por ende alcanzaba con que fuera tratada adecuadamente.

Luego que ingresara en Europa, se dieron directivas a todos los países para que cualquier persona que falleciera por enfermedades prevalentes o por cualquier otra causa, si tenía un test positivo de Covid, se certificara su deceso por esta causa, falseando la realidad de los datos de forma inexplicable.

Ese cambio de criterio generó pánico, como era lógico esperar, más allá que todos los inviernos hubiera los mismos decesos o más, causados por complicaciones con la gripe del virus de la Influenza con síntomas similares así como de contagio.

Se generó la “pandemia del miedo”, se desatendió todo lo referente a la Salud que no fueran los problemas respiratorios, dándole absoluta prioridad a una enfermedad que por ejemplo en nuestro país en el primer año causó 74 muertes. Una cifra baja si se compara con todos los fallecimientos producidos por las principales causas de muerte en el Uruguay desde hace décadas, pero que en muchas de éstas las mismas se duplicaron por no tratarse como se debía, en tiempo y forma, tal como vemos en los informes de estos últimos meses sobre los aumentos en el número de patologías severas, porque se suspendieron las cirugías, los exámenes preventivos y las consultas presenciales entre otras muchas “omisiones de asistencia”.

Con esas pautas, se dijo que la única solución eran las vacunas, entonces éstas se crearon, pero se hicieron desconociendo los tiempos y estudios previos que requieren para ser probadas y testeadas durante dos o tres años antes de ser aplicadas a la población.

Fue así que por régimen de excepción se validaron “inyecciones” que no contaban con las garantías necesarias. Fue así que no cumplieron su cometido, las dos dosis que garantizaban la “vida eterna”, que luego fueron tres y sigue la cuenta, empezando a hablarse de refuerzos de por vida.

Muchas que prometían ser igual de efectivas, no lo fueron, y países del primer mundo con altos índices de vacunación tienen por estas horas récord de infectados diarios en números que no se dieron antes que se empezara a vacunar. De hecho, en nuestro pequeño país, desde el 1º de Marzo al 1º de Julio, cuando se inició la vacunación masiva, en sólo cuatro meses murieron más de 5.000 personas, llegando a estar en el primer lugar a nivel mundial de fallecimientos por Covid por cada 100.000 habitantes.

A nivel mundial, al igual que acá, no se dieron los tiempos para que nuestro sistema inmunológico creara los anticuerpos en forma natural y las inyecciones hicieron que el virus siguiera mutando (nunca la humanidad conoció un virus que tuviera, en tan breve plazo, el número de variantes de éste).

Luego empezaron a llegar las variantes, que sirvieron para justificar el fracaso de estas “vacunas express”, en especial la Delta que explicó todo lo que salió mal, todo lo inexplicable o simplemente se culpó a los que no estuvieron de acuerdo en vacunarse.

Pero en estas horas aparecen los científicos del Instituto Nacional de Genética de Japón, país que pasó de tener 23.000 casos diarios en Agosto a 140 en Noviembre, indicando que la razón de este cambio tan radical es, ni más ni menos, debido a la imposibilidad del virus de reproducirse tras demasiadas mutaciones, lo que estaría haciendo que esta variante Delta esté mutando hacia la auto extinción. Pero para que esta positiva noticia pierda fuerza rápidamente ya tenemos una nueva cepa, la Ómicron, originada en Sud África, que promete ser peor que todas sus antecesoras.

Qué bueno hubiera sido que a nivel planetario, se hubiese dado el imprescindible debate entre muchos técnicos y expertos que sencillamente no coincidían con la “verdad única universal”, para escuchar, para entender mejor, para que quienes no tenemos la formación académica en esta temática pudiéramos nutrirnos de ambas vertientes y generar nuestra propia postura. Era nuestro derecho, estaba en juego nada menos que la salud y la vida de la raza humana.

En cambio se optó por acallar el disenso, descalificar al que pensara diferente, aunque éstos fueran científicos de igual o mayor nivel que los que sustentaron “la historia oficial”. Que alternativa se le dejó a quienes se vacunaron; la inmensa mayoría de éstos lo hicieron sin convencimiento alguno porque en todas partes se presionó a la población, se utilizó el miedo ya que los que no lo hicieran perderían Derechos, perderían Libertades y hoy países como Austria ya la han declarado obligatoria.

Y ahora, van por los niños. Ahora van por nuestros hijos o nietos, sabiendo que la realidad está marcando que ya se tomó un tremendo riesgo con los adultos, cuando aún no se saben las secuelas que dicha decisión va a mostrarnos en el devenir del tiempo.

Y van por los niños con un argumento execrable ya que se reconoce claramente que éstos no lo necesitan en absoluto, pero los ponemos en riesgo, que también se reconoce, porque eventualmente se podrían favorecer a los adultos o sea a nosotros mismos padres o abuelos. Por todo ello, por sentido común, basta, basta ya, a nuestros niños no, ni ahora ni nunca.

 

*) Alberto Fernando Prandi De Césare (63), casado, 3 hijos y 1 nieta.

Operador inmobiliario de Punta del Este y La Paloma desde 1978.

Presidente de la Asociación de Inmobiliarias de Punta del Este (Adipe), por dos períodos consecutivos 2001-2003 y 2003- 2005.

Subsecretario de Turismo y Deporte a partir del 2005 integrando el gabinete del primer gobierno progresista en la historia del Uruguay.

Presidente de Rotary de Punta del Este en el período 2002-2003.

Presidente y socio fundador de la Asociación de Empleados de Inmobiliarias (Aedi) por el período 2003-2005.

*) FAO

El informe de la FAO El estado mundial de la agricultura y la alimentación de 2021 pone de manifiesto la fragilidad de nuestros sistemas agroalimentarios y se ofrecen soluciones sobre cómo hacer frente a perturbaciones repentinas.

Los países deben hacer que sus sistemas agroalimentarios sean más resilientes a perturbaciones repentinas como las observadas durante la pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), que ha pasado a ser uno de los principales factores determinantes del último aumento de las estimaciones sobre el hambre mundial.

Según un nuevo informe publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), sin la debida preparación las perturbaciones de carácter imprevisible seguirán socavando los sistemas agroalimentarios.

La edición de este año del informe de la FAO El estado mundial de la agricultura y la alimentación (SOFA) se titula “Lograr que los sistemas agroalimentarios sean más resilientes a las perturbaciones y tensiones”. En él se ofrece una evaluación de la capacidad de los sistemas agroalimentarios nacionales de responder a las perturbaciones y factores de estrés o de recuperarse prontamente de estos. También se brinda orientación a los gobiernos sobre la forma en que pueden mejorar la resiliencia.

Hoy en día hay aproximadamente 3.000 millones de personas que no pueden permitirse una dieta saludable. En el informe SOFA se calcula que otros 1.000 millones de personas pasarían a engrosar las filas de quienes padecen este problema si una crisis redujera sus ingresos en un tercio. Además, los costos de los alimentos podrían incrementarse para 845 millones de personas si se produjera una alteración de las rutas de transporte fundamentales.

En el informe se definen las perturbaciones como “desviaciones de breve duración de las tendencias a largo plazo que tienen efectos negativos sustanciales en un sistema, el estado de bienestar de las personas, los activos, los medios de vida, la seguridad y la capacidad de soportar perturbaciones futuras”. Algunos ejemplos son los fenómenos meteorológicos extremos y el recrudecimiento de enfermedades y plagas de las plantas y los animales.

Incluso antes de que la COVID-19 estallara, el mundo estaba lejos de cumplir su compromiso de acabar con el hambre y la malnutrición para 2030. Y aunque las cadenas de producción y suministro de alimentos han sido históricamente vulnerables a los fenómenos climáticos extremos, los conflictos armados o las subidas de los precios de los alimentos, la frecuencia y la gravedad de estas perturbaciones van en aumento.

La publicación del informe no podría ser más oportuna.

“La pandemia puso de relieve tanto la resiliencia como la debilidad de nuestros sistemas agroalimentarios”, señaló el Sr. QU Dongyu, Director General de la FAO, en el acto virtual de presentación, en el que también realizó una exposición el Sr. Máximo Torero Cullen, Economista Jefe de la FAO, y se celebró una mesa redonda con responsables de la formulación de políticas y estudiosos.

Medidas concretas

Los sistemas agroalimentarios mundiales -la compleja red de actividades relacionadas con la producción de productos agrícolas alimentarios y no alimentarios, así como su almacenamiento, elaboración, transporte, distribución y consumo- producen 11.000 millones de toneladas de alimentos anuales y dan empleo a miles de millones de personas, de forma directa o indirecta. No se debe dejar de insistir en la urgencia de fortalecer su capacidad para resistir a las perturbaciones.

En el informe se presentan asimismo indicadores nacionales de la resiliencia de los sistemas agroalimentarios en más de 100 países y se analizan factores como las redes de transporte, los flujos comerciales y la disponibilidad de dietas saludables y variadas.

Aunque los países de bajos ingresos afrontan generalmente desafíos mucho mayores, las conclusiones del informe muestran que los países de ingresos medianos también están en riesgo. En el Brasil, por ejemplo, el 60% de su valor de exportación proviene de solo un socio comercial, por lo que dispone de menos opciones si un país asociado se ve afectado por una perturbación.

Incluso países de ingresos altos como Australia y el Canadá están expuestos al riesgo de una perturbación, debido a las largas distancias que hay que cubrir para distribuir los alimentos. En casi la mitad de los países analizados por expertos de la FAO, el cierre de conexiones esenciales de la red haría que el tiempo de transporte local aumentara en un 20% o más, aumentando así los costos y los precios de los alimentos para los consumidores.

Sobre la base de los datos empíricos del informe, la FAO recomienda que los gobiernos hagan de la resiliencia en los sistemas agroalimentarios una parte estratégica de sus respuestas a los desafíos actuales y futuros.

La clave aquí es la diversificación -de fuentes de insumos, producción, mercados y cadenas de suministro, así como de actores-, ya que la diversidad crea múltiples vías para absorber las perturbaciones. Apoyar la creación de pequeñas y medianas empresas agroalimentarias, cooperativas, consorcios y agrupaciones ayuda a mantener la diversidad en las cadenas de valor agroalimentarias nacionales.

Otro factor fundamental es la conectividad. Las redes agroalimentarias bien conectadas superan las alteraciones más rápidamente cambiando las fuentes de suministro y los canales de transporte, comercialización, insumos y mano de obra.

Por último, es fundamental mejorar la capacidad de resiliencia de los hogares vulnerables para asegurar un mundo sin hambre. Esto se puede lograr a través de la mejora del acceso a activos, a fuentes diversificadas de ingresos y programas de protección social en caso de crisis.

“En el informe SOFA se recogen los esfuerzos de la FAO dirigidos a aumentar la resiliencia y se establecen nuevos indicadores para ayudar a los Miembros a medir la capacidad de resiliencia de sus sistemas agroalimentarios y determinar carencias que necesitan mejoras”, declaró el Sr. QU.

*) La FAO es la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y es la agencia especializada que lidera el esfuerzo internacional para poner fin al hambre. Su objetivo es lograr la seguridad alimentaria para todos y al mismo tiempo garantizar el acceso regular a alimentos suficientes y de buena calidad para llevar una vida activa y sana.

Con más de 194 Estados miembros, la FAO trabaja en más de 130 países. Todos podemos desempeñar un papel importante en la erradicación del hambre y la malnutrición.

En Uruguay, nos enfocamos en apoyar el cumplimiento del Derecho a la Alimentación Adecuada; avanzar hacia un sistema alimentario sostenible; acompañar la intensificación de la producción agropecuaria, reduciendo la brecha entre sectores urbano y rural y preservando los recursos naturales.

Por más información: http://www.fao.org/uruguay

*) Ec. Pablo Broder

Hace ya más de seis décadas, así se titulaba un documento atribuido al General Perón frente a las elecciones que se irían a llevar a cabo en 1958, ordenando a sus huestes votar por el entonces candidato Dr. Arturo Frondizi. Un claro ejemplo de pragmatismo cuya contracara se está evidenciando con lamentable nitidez en estos tiempos.

El 14 de noviembre último tuvo lugar una jornada que puede estar llamada a ser un punto de inflexión en la historia política del país. Una derrota electoral profunda, que no deja lugar a dudas sobre el curso declinante del popukirchnerismo en la Argentina, reafirmando una tendencia se viene observando con claridad. Perdió en tres de las últimas cuatro elecciones.

Ese resultado no debería sorprender si se evocara simplemente algunos de los aspectos que castigaron en el pasado reciente la vida de los argentinos: Inflación  anual que para la mayoría de las estimaciones superará el 50 por ciento, desocupación creciente, nuevos impuestos, muestra de una asfixiante presión tributaria, cuarentena eterna con graves consecuencias físicas y emocionales, colegios cerrados a pesar del clamor de la comunidad educativa y las asociaciones de padres, millones de argentinos vacunados con Sputnik, que al día de hoy no fue aprobada por los organismos sanitarios de Estados Unidos ni de Europa, mientras que nuestro país podría haber contado con millones de dosis de vacunas Pfizer que el Gobierno demoró inexplicablemente en conseguirlas, más de 110 mil muertes por COVID, vacunatorio vip que dejó en evidencia los irritantes privilegios existentes en lo más alto del poder, cumpleaños vip, etc.

La dimensión del último fracaso electoral, podría estar indicando que se está consumando el fin de una triste época. El kirchnerismo estaría cerca de su ocaso definitivo.

No obstante, en la noche de la derrota, las expresiones de los vencidos, sus risas, cantos y festejos, el arabesco verbal de “perder ganando”, mostró con claridad otra de las lamentables facetas de su accionar: lo que privilegian siempre es el relato.

Cuenta lo que se dice. Vale la imagen. No importando la realidad, aunque sea su opuesto. Inversamente al razonamiento del antiguo líder justicialista cuando acuñó la histórica frase: “La única verdad es la realidad”.

El presidente Fernández, una vez más mostró su faceta desorientadora. En plena realidad de desastre electoral, convocó a un acto en la histórica Plaza de Mayo  para celebrar un triunfo ¡inexistente! ¡Perdieron por más de ocho puntos en todo el país.!

Y la población neutral contemplaba azorada los festejos, las expresiones ora triunfalistas, siempre agresivas, preguntándose: ¿Qué celebran? ¿De qué país vienen?

Vale para ellos el relato. Siempre la representación de una supuesta realidad, tratando de ocultar el curso efectivo (y doloroso) de los acontecimientos. Como por ejemplo con ese otro desatino de querer hacer menos evidente la inflación, negándose a poner en circulación billetes de superior denominación, obligando a operar con toneladas de papel moneda cuyo mayor valor (mil pesos) es el equivalente a alrededor de humildes cinco dólares.

Intento inútil: la inflación se sufre en la vida y no solo en el cajero automático.

No obstante, mientras el país deriva en un mar de incertidumbres y angustias respecto a su presente y sobre todo a su futuro, se abre una pequeña luz de esperanza: tal como se expresaba al inicio, podría estar cerca un cambio de época profundo, el fin de una era dolorosa para el país.

Y más allá del hálito bienhechor de esa perspectiva, también se puede prever una realidad casi inmediata: los resultados electorales sugieren que el Poder Legislativo   podría dejar de ser obediente seguidor del designio vicepresidencial, al no contar en ambas cámaras con las mayorías necesarias, tanto para el quórum como para la sanción de leyes que puedan afectar al estado de derecho y al equilibrio de poderes.

Se estaría evitando así, el avasallamiento institucional ejercido a través del dominio parlamentario. Hito fundamental para la vida de los argentinos.

Que así sea!

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Mag. José Luis Corbo

 

“… el gusto por mirar y por vivir se vincula en él íntima e inmediatamente con la actitud del que opina como perito” (Walter Benjamin)

Tal vez pocas cosas nos generen más sentimiento de libertad que expresar libre y abiertamente aquello que nos gusta. Pero pocas cosas son también más falsas que el libre albedrío del gusto. Tampoco es cierto que sobre gustos no haya nada escrito. Lo cierto es que sí lo hay, y bastante.

Los límites en cuanto al sentido del gusto, algo de lo que autores como Bourdieu, Adorno y tantos otros se han ocupado, son diversos, y la forma en que los gustos se configuran reflejan un sinnúmero de relaciones que configuran un sujeto particular en cuanto a su dimensión única, pero con un condicionamiento tal que su gustar se reduce a la analogía de la colcha de retazos, aquella que es diferente a todo pero igual a mucho.

Fromm refería al concepto de inconsciente social, en sus manías de atar a Marx y a Freud. Ese inconsciente social configura estados de consciencia que se encargan de instalar en los sujetos una suerte de piloto automático que define los límites de las acciones y de los sentires.

La manipulación subliminal e inconsciente, de génesis práctica, se mueve para Fromm en primer lugar al ritmo de las relaciones productivas. El mercado y sus relaciones de producción, en esa ardua tarea de producir tanto los objetos como los consumidores, y apoyado en la industria propagandística y el marketing, no solamente genera falsas necesidades -una de sus tareas fundamentales- sino que desarrolla a la vez sentidos estéticos. El mercado debe, obligatoriamente, construir la dimensión estética de los objetos que produce y asignarles imperceptiblemente un valor de cambio.

Esta lógica se extiende desde los objetos más básicos y de uso diario hasta la producción de la industria cultural. El mercado se empeña de igual forma en perfumar el papel higiénico o imprimirle dibujos infantiles, que en venderte un artista por radio o televisión.

Todo tiene valor de cambio y todo te puede llegar a gustar en tanto la popularidad del objeto despierte el interés latente del potencial consumidor.

Además, y en esto podríamos adherir con Bourdieu, los diversos campos prácticos en los que nos movemos construyen habitus, formas de ser y de hacer que representan esos espacios de acción de los que devienen, y que son propios de ellos. Hasta la comida que nos gusta nace de relaciones prácticas, objetivas, que definen el ser social y se instalan sobre el sujeto en su individualidad pero se mueven dialécticamente entre el todos y el uno.

La lucha de clases reside a su vez al interior de los gustos y el gustar no es privilegio de los cultos sino que es adherir a parámetros estéticos hegemónicos impuestos por aquellos que, desde el pedestal de los grandes, asignan valor a objetos y acciones, juzgando con vara propia lo que dan a llamar el buen gusto. Por otra parte, el mal gusto no es más que el gusto no hegemónico. Es decir que no es ni occidental, ni católico, ni burgués.

Como bien lo decía Benjamin, el gusto nace de la voluntad del perito, voluntad que representa intereses de clases, intereses que reflejan dinámicas de clases y que excluyen a partir de la capacidad de gustar a aquellos que no están preparados para el buen gusto. A los pobres no les gusta el ballet -símbolo burgués si los hay- pero sí le gusta la torta frita. El arte y la panza emparentados y representando la lucha de clases que jamás se acaba pero que se esconde, aunque siempre se ve. Como el asesino de la película atrás de la cortina.

Gustar puede llegar a operar como el mayor simulador de clase en cualquiera de sus formas y sentidos. Si me junto con el rico y no como Sushi, mis gustos de pobres me condenan. Si soy pobre y quiero tomar un buen vino, no puedo, porque el buen gusto, reservado para los otros, me lo prohíbe.

En fin, no es tanto lo que nos gusta -por originales- sino lo que la sociedad nos hace gustar. Lo que parece claro es que hasta para tener buen gusto, las condiciones estructurales de base nos condicionan. Hoy, parece hasta una cuestión de mal gusto seguir hablando de lucha de clases.

 

*) Licenciado en Educación Física. Magister en Didáctica de la Educación Superior. Posgrado en Didáctica de la Educación Superior. Actual Director Coordinador de Educación Física de CEIP Maldonado.

Integrante de la línea "La Educación Física y su Enseñanza" adscripta al grupo “Políticas Educativas y Formación Docente. Educación Física y Prácticas Educativas”.

*) Javier Claure Covarrubias

El pasado 7 de octubre, el secretario permanente de la Academia Sueca, Mats Malm, anunció el nombre del novelista Abdulrazak Gurnah como ganador del Premio Nobel de Literatura 2021.

Abdulrazak Gurnah es un escritor y crítico literario nacido en Zanzíbar (Tanzania). A los 18 años abandonó su país a consecuencia de la persecución a ciudadanos árabes. En 1966 llegó al Reino Unido como refugiado, y allí empezó a estudiar.

Primero en el Christ Church College y luego obtuvo un doctorado en la Universidad de Kent, en donde trabajó como catedrático de postgrado en el departamento de inglés, hasta su jubilación.

Según el jurado, la obra de Gurnah se caracteriza por la “penetración intransigente y compasiva en los efectos del colonialismo y el destino del refugiado en el abismo entre culturas y continentes”.

El autor de “Memory of Departure” (Recuerdos de la Partida) ha escrito en total diez novelas, y dos de ellas están traducidas al sueco: “Paraíso” (Paradiset) y “El último regalo” (Den sista gåvan). En realidad, es poco conocido. Y, por consiguiente, su nombre no figuraba en las quinielas ni en las apuestas acerca del Premio Nobel de Literatura 2021.

Tampoco sus obras eran pronunciadas por labios de expertos en literatura. En otras palabras, el nombramiento de Abdulrazak Gurnah, como ganador del Premio Nobel de Literatura, cayó en Suecia, y en el mundo entero, como una estrella por la que nadie apostaba un centavo. Y este asombro se refleja tanto en la prensa sueca como internacional.

A nadie se le pasó por la mente que este escritor tanzano, se llevaría el galardón literario más preciado del mundo. Muchos editores suecos han reconocido su ignorancia sobre el flamante ganador del Nobel de Literatura. Y han dicho: “debemos ser sinceros, no conocemos al escritor. De pronto somos tan suecos, tan insulares, tan ignorantes y tan descubiertos”.

Stefan Jonsson, crítico literario del periódico “Noticias del Día” y catedrático de la Universidad de Linköping, dijo que la elección de Abdulrazak Gurnah nos lleva a conocer una literatura que no se encuentra fácilmente en Suecia. Y acotó: “Ahora el Premio Nobel cumple su potencial en todo el sentido de la palabra: abrir puertas a otros mundos, a otras vidas humanas que no conocemos”.Abdulrazak Gurnah como ganador del Premio Nobel de Literatura 2021.

Pero más allá de eso, todos se preguntan: ¿Cómo ha sido la elección de Abdulrazak Gurnah?

Para nadie es nuevo que desde el inicio del Premio Nobel de Literatura, en 1901, la Academia Sueca ha otorgado el Premio, en la mayoría de los casos, a escritores europeos y norteamericanos. Según una estadística de la propia Academia Sueca, los países con más Premios Nobel de Literatura son: Francia 15, Estados Unidos 13, Gran Bretaña 12, Alemania 8, Suecia 8, Italia 6, España 5, Polonia 4, Irlanda 3 y Dinamarca 3.

El testamento de Alfred Nobel establece que el Premio Nobel debe ser otorgado a personas que “hayan realizado el mayor beneficio a la humanidad”. Pero también para aquellas personas que “hayan producido la obra más sobresaliente de tendencia idealista dentro del campo de la literatura”. Pero… ¿Cómo interpretar esa frase ambigua? Cada período histórico está marcado por diferentes modas, características, conflictos, acontecimientos,  contradicciones, coyunturas, etc. Es decir, la vida fluye por una cadena de factores históricos y sociales. Y a medida que va pasando el tiempo, creo que se han llevado a cabo diferentes interpretaciones del testamento de Alfred Nobel dependiendo de la época.

En cualquier caso, Anders Olsson, miembro del Comité Nobel, ha dicho a la prensa: “Tenemos los ojos abiertos hacia escritores que podrían llamarse poscoloniales. Nuestra mirada se hace más amplia con el tiempo. Y el objetivo de la Academia es vigorizar nuestra visión de la literatura en profundidad. Por ejemplo la literatura en el mundo poscolonial”.

Sin embargo, surge la pregunta: ¿Será que el próximo Premio Nobel de Literatura recaerá en un escritor de América Latina? ¿De Asia? o ¿Quizá nuevamente en un escritor de África?

*) Es poeta y sociólogo boliviano. Nació en Oruro, capital folklórica de Bolivia. Es miembro del Pen-Club Internacional, de la Unión Nacional de Poetas y Escritores de Oruro (UNPE), de la Sociedad de Escritores Suecos, del Movimiento Poético Mundial (World Poetry Movement), del Liceo Poético de Benidorm (España) y miembro de número (300-ES-026) de la Academia Norteamericana de Literatura Moderna, Capítulo España.

Ejerce el periodismo cultural. Ha estudiado informática en la Universidad Real de Tecnología de Estocolmo (Kungliga Tekniska Högskolan) y en la Universidad de Uppsala (Suecia). También estudió matemáticas en la Universidad de Estocolmo, casa de estudios donde además obtuvo una Maestría en Pedagogía y una Licenciatura en Sociología.

*) Fabián Manise

Hola amigos un gusto volver a estar en contacto, máxime cuando estamos transitando en la estación más prolífera en materia de multiplicidad de plantas para cultivar tanto en el jardín como en la huerta.

El clima poco a poco se torna más benévolo y ello invita al laboreo a cielo abierto. Es tiempo de planificar y hay varios factores a considerar, por ejemplo como está el suelo en materia de nutrientes, el drenaje, cuántas horas de sol precisa y como se distribuirán los nuevos ejemplares.

A la referida tarea se suma el monto de dinero que se puede gastar, pues si bien los precios de las plantas son muy variables, es conveniente asegurarse que la mayoría prospere y a la vez que no demanden en forma individual cuidados especiales.

Si se gusta que el jardín ofrezca una paleta de colores, la opción es mezclar florales de distintas alturas y para la ocasión, plantas anuales por su máximo rendimiento a lo que sumaría arbustos de poco porte pues proporcionaran al paisaje una estructura y tonos duraderos.

Entre la gran variedad de plantas que se pueden encontrar está la Peonia, fácil de cultivar y no ofrece dificultades ante los posibles vaivenes de la temperatura. En el mismo rubro aparece la conocida boca de sapo, aunque su nombre específico es Snapdragon, ejemplar perenne que se cultiva como anual, sus flores de distintos colores se mantiene hasta mediados del verano.

Los Hemerocallis son preferidos por muchos, pues sus flores parecidas a las azucenas son muy bellas y fáciles de propagar, brindan una distinguida variedad de colores. Si se busca un arbusto, no duden por inclinarse por la Spiraea conocida como coronita de novia. Sus diminutas flores aparecen en su máximo esplendor durante el verano en forma de cascada y son realmente espectaculares.

Otra especie muy requerida es el Caladio. Le aporta color a un jardín sombreado, aunque puede tolerar un poco de sol. Viene en varias tonalidades: blanco, rojo, verde y rosa. Precisa luz abundante pero nunca el sol directo. En materia de plantas trepadoras se distingue en la presente estación una conocida vulgarmente como Susan de ojos negros; estas margaritas doradas se mantienen hasta entrado el otoño, requiriendo una exposición a pleno sol y suelo bien drenado.

Si bien en materia de elección, la primavera abre un abanico tanto en cantidad como en la aparición de nuevos florales logrados a través de distintas técnicas, lejos estarían los mismos de cumplir su ciclo vital, sino se les sumara un suelo propicio para que se desarrollasen. En torno a esto último, en notas anteriores he dado cuenta respecto a que fertilizantes orgánicos son los adecuados, a lo que agrego cuándo según las fases de la luna se debería llevar a cabo tal tarea.

En luna nueva la luz de nuestro satélite no es lo suficientemente potente por lo que se aconseja  fertilizar con humus líquido de lombriz dado que la savia se moviliza en la base de la planta concentrándose en la raíz. Se debe seguir el mismo procedimiento cuando la luna aumenta su luminosidad en creciente, dado que la savia comienza a movilizarse hacia el tallo. La oportunidad es propicia también para eliminar las hojas secas y enfermas.

Llegada la etapa de luna llena la claridad aumenta y es momento de utilizar humus sólido en virtud que la savia en su ascenso llega a las hojas. Asimismo es buena época para llevar a cabo trasplantes. En la fase menguante el proceso vuelve a iniciarse, es decir la savia retorna hacia la raíz por lo que se debe utilizar una mezcla de compost con abono animal.

Entorno a fertilizantes orgánicos existe uno al alcance de la mano muy beneficioso y que en muchos casos va a la bolsa de los residuos descartables. Me refiero a las cascaras de huevos, muy ricas en calcio que se libera lentamente. Solo basta con triturarlas cuando estén secas, adicionar posos de café y mezclar el polvo resultante con la tierra o el sustrato que se vaya a usar.

Algunas plantas, como las rosas por ejemplo, precisan ser tratadas con abonos ricos en calcio. Amigos por el momento es todo, nos volvemos a reencontrar en una próxima entrega, no obstante cualquier consulta no duden en hacérmela llegar a través de mi Correo Electrónico Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.

 

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) Ec. Pablo Broder

La Argentina prosigue su despeñamiento hacia un fondo cuyas características aún son impredictibles.

En tal contexto se sumó un peligroso episodio de amenazas en la red por parte del Ministro de Seguridad, hacia un conocido dibujante argentino (en forma de velada alusión hacia sus hijas -y por qué no, como algunos señalan, impregnada de cierto “tufillo antisemita”, agravado por el silencio cómplice de las autoridades nacionales-).

Analistas económicos dan cuenta que el pronóstico de hace poco tiempo, en el sentido que la inflación prevista para el próximo año sería del rango de 40/50% se han visto superadas ante el alud emisor -consecuencia del festival de regalos y prebendas preelectorales- alcanzando en varios de sus análisis el posible orden del 60%.

Simultáneamente, un informe publicado recientemente (La Nación 1-10-21) da cuenta que en Argentina creció más la pobreza que en Chile y en Uruguay destacando cómo en la misma coyuntura los países vecinos, “administraron el encierro focalizándolo en los lugares donde la infección era más intensa… En el caso de Uruguay además el aislamiento fue aconsejado, pero no impuesto, al tiempo que un año y medio después los resultados son que Argentina acumula 2.500 muertos por millón de habitantes, mientras que Chile 2.000 y Uruguay 1.800. Lamentablemente, el encierro estricto no evitó tener más muertes…”.

Por su parte, el Banco Mundial advirtió sobre otra “década perdida” y pronosticó una fuerte desaceleración del producto bruto interno de la Argentina que tendría  una humilde tasa de crecimiento de apenas el 2,6% el año próximo. (La Nación 6-10-21)

Como reafirmación del triste pronóstico internacional, dos sectores vitales de la economía mostraron números en rojo en agosto, respecto de julio: mientras que la industria retrocedió 0,6%, la construcción cayó 2,6%, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), agregando que la industria ya hilvana dos meses consecutivos de caída, situación que no augura buenas noticias para el tremendo desempleo que ostenta el país.

No resulta extraño, en consecuencia, que los índices sobre la confianza en el Gobierno se derrumbaran, a pesar del aluvión de “regalos”, planes, proyectos de leyes y actos oficiales.

En otro orden, los movimientos sociales fueron adquiriendo, a lo largo de los últimos  tiempos, una dimensión que alarma no ya a sectores de derecha, sino al progresismo oficial hasta ahora adicto o cómplice de la tortura a la que llevan las diarias manifestaciones en puentes, plazas y avenidas, que hacen que el desplazamiento en el país sea un hecho imprevisible y tortuoso.

En este contexto, aparecen en el accionar oficial dos ejes bien definidos: poner “platita” (doctrina Gollan) en los bolsillos, y profundizar la radicalización populista de la línea gubernamental, orientación ratificada, por fuera de los diarios pronunciamientos oficiales en tal sentido, en la designación del nuevo secretario de Comercio, de una clara afinidad por el control estatal y la desconfianza, cuando no la enemistad, hacia el accionar privado, que auguran horizontes más oscuros para este sector.

Asimismo la vigencia inalterada de los diferentes cepos a la actividad económica, así como un nuevo proyecto oficial ingresado en la Cámara de diputados, que prevé un mayor intervencionismo tanto estatal como sindical en las empresas, son una nueva muestra de esa orientación.

Frente al trágico panorama de la Argentina en franca decadencia, la única alternativa para evitar la inevitable colisión con un futuro de destrucción institucional, social y económico, consiste en hacer oír las voces de protesta, y fundamentalmente, ejercer en las próximas elecciones el fundamental derecho constitucional: el voto.

Nada más y nada menos.

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.